El pasado mes de mayo, el renombrado científico brasileño Sérgio Machado Rezende fue retirado de su cargo como presidente de la Fundación de Apoyo a la Investigación Científica del Estado de São Paulo (FAPESP) por decisión de la 21ª Vara Cível Federal de São Paulo. Esta noticia ha causado gran conmoción en la comunidad científica y académica de Brasil, ya que Rezende es considerado uno de los líderes más destacados en el ámbito de la investigación y el desarrollo científico en el país.
La decisión de la corte se basó en una demanda presentada por el Ministerio Público Federal, que alegó que el nombramiento de Rezende como presidente de la FAPESP en 2016 fue ilegal debido a su edad. Según la ley brasileña, los presidentes de las fundaciones estatales deben tener menos de 70 años de edad, y Rezende, en ese momento, tenía 71. A pesar de que la ley fue modificada en 2018 y ahora permite que los presidentes de estas fundaciones tengan hasta 75 años, la demanda se basó en la normativa anterior.
Esta decisión ha generado una gran controversia en la comunidad científica, ya que Rezende es ampliamente reconocido por su amplia trayectoria en el campo de la investigación y su valioso aporte al desarrollo de la ciencia en Brasil. Durante su mandato como presidente de la FAPESP, Rezende lideró importantes proyectos de investigación y promovió el fortalecimiento de la colaboración entre instituciones científicas y académicas en el país. Bajo su liderazgo, la FAPESP también ha sido reconocida internacionalmente por su eficiencia y transparencia en la gestión de fondos para la investigación.
Además, la decisión de la corte ha sido criticada por muchos expertos en derecho, quienes argumentan que la normativa sobre la edad de los presidentes de las fundaciones estatales es discriminatoria y limita la capacidad de los científicos mayores de seguir contribuyendo al progreso del país. En este sentido, se ha iniciado una campaña en redes sociales bajo el lema “La ciencia no tiene edad”, en apoyo a Rezende y en defensa de la igualdad de oportunidades para los investigadores en Brasil.
A pesar de esta situación, Rezende ha mantenido una actitud positiva y ha expresado su agradecimiento por el apoyo recibido de la comunidad científica y académica. En una reciente entrevista, destacó que su principal preocupación es garantizar la continuidad de los proyectos y programas de investigación en curso en la FAPESP, y aseguró que trabajará para que su sucesor tenga una transición suave y pueda continuar con el legado de la fundación.
Por su parte, la FAPESP ha emitido un comunicado en el que resalta los logros de Rezende durante su mandato y reafirma su compromiso con el desarrollo de la investigación científica en Brasil. También ha anunciado que se presentará un recurso de apelación ante la decisión de la corte y se espera que se resuelva en los próximos meses.
A pesar de esta situación, la comunidad científica de Brasil se mantiene firme en su apoyo a Sérgio Machado Rezende y su legado en la FAPESP. Su liderazgo y dedicación han sido fundamentales para el avance de la ciencia en el país y su trabajo ha sido reconocido a nivel nacional e internacional. Además, esta controversia ha generado un debate importante sobre la discriminación por edad en el ámbito científico y ha puesto en relieve la importancia de garantizar la igualdad de oportunidades para todos los investigadores.
En conclusión, la decisión de la corte de retirar a Sérgio Machado Rezende de su cargo en la FAPESP ha causado una gran conmoción en la comunidad cient
